Muchos de vuestros perretes disfrutan todos los años de unas vacaciones maravillosas en la naturaleza en la que posiblemente compaginaréis refrescantes baños y paseos estimulantes por los lugares más recónditos de la geografía española.
Del mismo modo que los humanos protegemos nuestra piel con cremas solares ante el sol, las almohadillas de nuestros perros requieren de cuidados especiales para tantas horas de abrasión durante los largos paseos por caminos así como por la humedad en el caso de remojones en ríos, pozas y playas.
Por eso, hoy queremos contaros nuestra propia experiencia al respecto, en concreto, los cuidados que hemos llevado a cabo a uno de nuestros perretes durante las vacaciones. Para que os pongáis en situación, Ares ha pasado buena parte de las vacaciones en las inmediaciones de un pantano, dando paseos de 3 horas y, para protegerlo, hemos usado algunos productos ‘low cost’.
En realidad, hemos optado por esta opción y no por una opción específica para el cuidado de las almohadillas de las que se encuentran en el mercado, debido al tamaño de los botes. Con nuestro ‘pack’ hemos usado generosamente los productos elegidos a diario durante 10 días y todavía nos sobra producto. Sin embargo, las opciones específicas suelen ser muy pequeñas para un uso continuado.
Se trata, además, de productos que deberían ingerirse en grandes cantidades de solución para que llegaran a resultar tóxicos para nuestros perros. En cualquier caso, antes de cualquier tratamiento sobre vuestros perros, como siempre os recomendamos, consultadlo con el veterinario.
Otro aspecto que valoraremos también es si tenemos un perro excesivamente nervioso con el lamido de sus patas. De ser así, podemos usar unos calcetines viejos para dejar actuar el producto o colocar una toalla/sábana por encima de sus patas para desviar su atención y que no perciba el olor del producto.
¿Cuáles son, entonces, los tres productos baratos e indispensables para cuidar las almohadillas de tu perro en vacaciones de los que venimos hablando? ¡Allá vamos!
Producto nº1 para cuidar las almohadillas de tu perro en vacaciones: Betadine
¿Qué es?
Producto estrella en cualquier botiquín. Es uno de los desinfectantes para la piel más común y utilizado.
¿Cuánto cuesta?
Sobre 1-2 €
¿Dónde lo compro?
En cualquier farmacia o sección de parafarmacia de tu supermercado.
Cómo lo hemos usado nosotros
En nuestro caso hemos llenado un pulverizador con aproximadamente 75% de agua y un 25% de betadine. El pantano que frecuentamos no es de arena, sino de cantos rodados, por lo que las heridas en la piel son habituales. Después de cada baño, pulverizamos generosamente y sin miedo las almohadillas fácilmente gracias al pulverizador y dejamos que se seque en el camino a casa mientras paseamos (en nuestro caso unos 5 minutos). Procuramos evitar al máximo las zonas de tierra para no producir barro. Es habitual que nuestro perrete una vez llegamos a nuestro lugar de descanso se chupe las patas para quitar el exceso, sin embargo son pocos segundos los que se está lamiendo por lo que no ha supuesto ningún problema.
Producto nº2 para cuidar las almohadillas de tu perro en vacaciones: Vaselina
¿Qué es?
Es uno de los productos hidratantes más usados.
¿Cuánto cuesta?
Hemos visto disparidad de precios, pero nosotros hemos optado por la versión de 100 ml de una conocida cadena de supermercados por unos 2€.
¿Cuánto dura?
Usándolo diariamente 2 veces durante 10 días, hemos gastado aproximadamente el 70% del bote.
Cómo lo hemos usado nosotros
Justo antes de los largos paseos, para mantener hidratadas y generar una película protectora. No lo hemos usado antes del baño ya que nos parecía inservible. Hay que procurar dejar secar un poco el producto antes del contacto con caminos y piedras, ya que si no puede generar algo de barro en las patas y en ocasiones llegar a resultar contraproducente. Además hemos aplicado nuevamente antes de llegar a nuestro lugar de descanso, e incluso podemos repetir a lo largo del camino dependiendo del estado de las almohadillas. En algún caso lo hemos compaginado con el betadine, siempre aplicando primero el betadine y una vez seco aplicando la vaselina.
Es muy interesante empezar con el tratamiento con vaselina una semana antes de las vacaciones e, incluso, realizarlo periódicamente como tratamiento habitual, ya que podréis comprobar cómo las almohadillas se vuelven duras, pero al mismo tiempo flexibles para amortiguar los impactos.
Producto nº3 para cuidar las almohadillas de tu perro en vacaciones: Aloe Vera Puro. Cicatrizante
¿Qué es?
Es una planta que se usa como regenerador cicatrizante.
¿Cuánto cuesta?
Al igual que con la vaselina puedes encontrarte variedad de precios. Nosotros, al igual que la vaselina, hemos optado por la misma cadena de supermercados y hemos conseguido el bote de 200 ml por menos de 6 €.
¿Cuánto dura?
Hemos usado el producto durante 10 días de forma diaria y hemos gastado un 60% del bote aproximadamente.
Cómo lo hemos usado nosotros
Hay que buscar una opción pura, sin aditivos, para que si nuestro perrete se lame no haya ningún problema. Lo hemos usado sobre todo en las almohadillas más castigadas. Durante estos días ha tenido algún corte y lo hemos aplicado directamente sobre los cortes. Para no estresar mucho al perro, ya que hemos estado alternando betadine y vaselina, lo hemos aplicado una vez el perro está profundamente dormido, rendido por el cansancio. Una vez nuestro perro lleva 1 hora dormido o incluso más, situación en la que notamos que no se levantaría ni ante una suculenta salchicha, hemos impregnado la almohadilla de nuestro peludo y dejado secar al aire. Si notamos que se activa, podemos hacerle masajes relajantes para que el perro vuelva a la situación de calma durante el sueño o incluso poner una mantita encima de la pata para ocultar el olor del producto y que no se lama, tal y como os hemos indicado al principio del artículo.
Esta es nuestra experiencia de primera mano con uno de nuestros compañeros de viaje, pero seguro que hay muchas más opciones, alternativas y plannings que puedan ser igual de interesantes para el cuidado de tu perro. Ante todo este tratamiento tiene que ser para mejorar la estancia en vacaciones del perro, por lo que si detectamos que nuestro perro se estresa al tener las patas impregnadas de producto, te aconsejamos busques otras maneras de proteger las almohadillas, como unos botines o el uso de calcetines en algunas situaciones.
¿Nos cuentas cómo proteges las almohadillas de tu perro? Déjanos un comentario en este post o en nuestras redes sociales.