Sabemos que a muchos de vosotros os encanta practicar el senderismo con perro. Por eso, hoy os proponemos una ruta muy sencilla por un camino natural en la Hoya de Huesca, muy cerca también de la ciudad de Zaragoza: el Camino Natural de Pedro Saputo. Podremos recorrerlo tanto en bici como a pie y, además de ser muy fácil, el desnivel apenas oscila entre los 15 y los 90 metros.
El punto de partida para recorrer el Camino Natural de Pedro Saputo está a las afueras de la población de Almudévar, muy cerca del antiguo castillo musulmán de la población que podremos contemplar presidiendo el paisaje desde un cerro. Sus ruinas albergan, además, la ermita de la Virgen de la Corona, de estilo cisterciense. Muy cerca de ella, encontraremos la primera señalización de esta ruta que os proponemos para quienes gustáis de hacer senderismo con perro.
Desde ese punto, en las inmediaciones de esta población oscense, famosa también por sus trenzas dulces, nos espera un recorrido de unos 27,2 kilómetros de extensión que nos llevará cerca de siete horas completar (más allá del tiempo que tengamos que añadir para recorrerlo al ritmo de nuestro querido peludo).
Pocos metros después de comenzar esta ruta por el Camino Natural de Pedro Saputo, encontraremos uno de los puntos de interés turístico de Almudévar, la Fuente de los Tres Caños, de origen musulmán y actualmente usada para riego. La fuente forma conjunto con el abrevadero y está realizada en sillares de piedra rejuntados en yeso, mientras un arco rebajado abierto en muro de sillería cobija los caños y la pileta en el interior de una estructura cuadrangular de mayores dimensiones.
Junto a la Fuente de los Tres Caños, encontraremos también el primer área de descanso de esta ruta, así como un panel informativo en el que podremos conocer más sobre el personaje que da nombre a la ruta: Pedro Saputo. Nacido en Almudévar, Pedro Saputo es un personaje literario del siglo XIX, cuyo apellido ha derivado también en apodo para los oriundos de esta población, a los que se conoce como “saputos”.
Continuaremos caminando (o pedaleando) en dirección noroeste. Conforme avanzamos, la pista irá aproximándose a la margen izquierda del Canal de los Monegros y, mientras pasamos por campos de vides, olivos y almendros, podremos deleitarnos con las vistas de las sierras del Prepirineo aragonés.
El camino continuará prácticamente sin desvíos hasta el kilómetro 7. En ese punto, cambiaremos de sentido y giraremos bruscamente a la izquierda, cruzando el Canal de los Monegros y su carretera de servicio, mientras el trazado de la ruta se acopla al de la Acequia de la Violada y, en algunos puntos, también a su antiguo cauce.
Y así, tranquilamente, llegaremos a la población de Valsalada, un antiguo pueblo de colonización de los que se contruyeron en los años 40 para repoblar las zonas menos habitadas de la Península Ibérica. Poco después de pasarlo, llegaremos a la balsa de riego de la Magdalena y, junto a ella, encontraremos otra área de descanso con paneles explicativos.
Un tramo después, encontraremos un triple desvío que nos permitirá continuar en tres direcciones: hacia el corredor ecológico, hacia la ruta aromática y hacia la subida al mirador. El Camino Natural cruza la carretera de Gurrea de Gállego por una pasarela elevada y, ahora sí, ya estaremos atravesando los últimos kilómetros antes de llegar al punto final, en El Temple.
Antes de ello, podremos ver un panel que nos indicará el punto de confluencia entre el actual Canal de los Monegros y su cauce antiguo y, poco después de eso, el Camino Natural se separará de la acequia de forma definitiva continuando en dirección oeste hacia un sombreado y apacible prado de moreras, muy cerca de la población de El Temple, donde terminará este recorrido que os proponemos para quienes disfrutáis del senderismo con perro.
Dónde dormir si vamos a practicar senderismo con perro por el Camino Natural de Pedro Saputo
Si vamos a recorrer con nuestro perro el Camino Natural de Pedro Saputo, o si buscamos un lugar para descansar después de la caminata, os recomendamos alojaros en el Camping El Temple, ubicado en la población del mismo nombre.
Situado a apenas media hora tanto de Huesca como de Zaragoza, este camping es perfecto para alojarnos con nuestro peludo ya que no establece límites por raza o tamaño. La única restricción es el máximo de dos perros por estancia (siempre y cuando sean de tamaño pequeño). Además, el camping cuenta con amplios espacios verdes en los que nuestro/s perro/s podrá/n correr y jugar a sus anchas.